Al verla por primera vez de ella me enamore
la ventura marcaba otro rumbo para su corazón
ella prefirió otro amor, otros brazos albergaron
lo que yo más quería en la primavera
de mi existencia, en el albor de mi juventud
¡cuánto la quiso mi corazón amante!
como desfloraba ni presencia mustia.
Puse mis ojos en otro amor con revividos vientos
otra flor llenaba la existencia de mis años nuevos
mi vida cambio y la magnificencia del destino
encaminó mi vida en el himeneo temprano
y ella quiso impedirlo sin saber yo, por qué
acaso ella me amaba en su silencio inerte.
malsanamente quiso destruir lo que no amaba.
Solo el devenir del tiempo consideraba sanar las
heridas
cuando ya no la esperaba en mis ansias vivas
el sino despiadado la ponía frente a mi existencia
y ella viendo el fruto de mi amor lo confrontaba
con el
de ella y clamaba deberían ser una sola verdad
una sola carne fruto de nuestro amor inexistente
como entender la mutabilidad de su alma.
.
Solo ella lo sabía que pasaba por su mente
años de amores y desamores de nuestras vidas
ahora ella daba muestra de un amor tardío
pero mi alma ya no sentía amor por ella
era solamente un bello recuerdo del pasado.
un desgarrador grito imposible de escuchar
un tardía respuesta a mis idos años
.
Se imponía una nueva separación de amores
quiméricos
el tiempo inexorable pasaba, tornaba y traía
noticias de ella
el padecimiento llenaba su presencia en la
distancia
el cáncer destrozaba para siempre su belleza, su
vida,
mi alma se vistió de duelo una vez más por ella
para siempre
nunca dijo adiós tampoco dijo si me amaba
la soledad interroga mi alma ¿Me habrá amado alguna
vez?
FABIO ALBERTO CORTÉS GUAVITA
POETA MAESSE